Pequeños cambios pueden tener grandes resultados, eso es un hecho.

Si estos pequeños cambios son constantes, los resultados pueden ser aún mayores. Hecho.

El éxito viene precisamente de pequeños y constantes cambios de hábitos.

Si vas a esperar el momento adecuado para hacer algo grande, eso es todo lo que vas a hacer: esperar. Y nada cambiará. 

Lo que necesitas, en este momento, es cambiar tu mentalidad y entender que el proceso de adquisición de nuevos hábitos no es lineal: tendrás altibajos, como: aprender, fallar, aprender, fallar, intentar aprender de otra manera, fallar, aprender… Y así sucesivamente, hasta que realmente consigas convertir esa acción en un hábito.

El texto de hoy está basado en el libro Hábitos atómicos por el autor James Clear. Continúa leyendo el post para entender la base del razonamiento y, si quieres profundizar, busca el libro. ¡Vale la pena!

¿CÓMO ESTABLECER METAS?

Saber a dónde quieres llegar es el primer paso para lograr tu objetivo, pero lo que realmente te ayudará a lograrlo es los procesos necesario para que llegues allí. Al fin y al cabo, no tiene sentido saber cuál es tu destino pero no saber el camino para llegar a él, ¿no crees?

Al iniciar el viaje de crear un nuevo hábito, también debes tener muy claro lo que necesitarás hacer para lograrlo. Por ejemplo, si tu objetivo es empezar a comer más fruta, también determinas que comerás una pieza de fruta cada día en el desayuno.

Otro ejemplo sería: tu objetivo es usar menos tu celular, así que decides que todos los días a partir de las 9pm dejarás tu celular de lado.

EL PODER DE UN PEQUEÑO HÁBITO: ESE 1% DEL CAMBIO.

Pensar que los grandes resultados sólo provienen de grandes acciones es un gran error.

Pequeñas mejoras diarias pueden traer resultados increíbles. Piénsalo: al mejorar 1% por día, ¿cuánta mejora habrás acumulado al final del año?

1% se puede realizar todos los días.

36,5% todos los días? Ahí es donde se complica.

Nuestros resultados son consecuencias tardías de nuestros hábitos, así que concéntrese en el viaje, no en el destino.

TUS HÁBITOS TE TRANSFORMAN EN QUIEN QUIERES SER.

Hoy ¿eres quien quieres ser? Los hábitos tienen el poder de llevarnos a esa versión ideal que tenemos de nosotros mismos y, muchas veces, incluso pensamos que es inalcanzable, precisamente porque no nos centramos en el camino.

Ya sabes, hay tres capas de cambio de comportamiento:

La primera capa y la más superficial es la que se centra en los objetivos, es decir, los resultados.

La segunda es la capa de proceso, donde nos centramos en implementar procesos que mejoren los hábitos y los sistemas.

La tercera y más profunda es la capa del cambio de identidad, donde cambiamos nuestras creencias y formas de ver las cosas.

Cuando nos centramos en crear hábitos basados en la identidad, nos centramos no sólo en lo que queremos lograr, sino en quiénes queremos ser.

Y cuando el hábito está alineado con quienes somos, permanece.

LA REPETICIÓN ES LA CLAVE PARA TODAS LAS HABILIDADES.

No siempre será divertido, pero no hay escapatoria: la repetición.

Para que un hábito se convierta realmente en un hábito, es necesario repetirlo varias veces, hasta que se vuelva automático.

Esta es la trayectoria de la mayoría de los hábitos y nos aporta un dato interesante: los hábitos se forman a partir de frecuencia con las que se practican, no desde tiempo en las que se practican.

¿CÓMO CREAR UN NUEVO HÁBITO?

Cada vez que quieras cambiar tu comportamiento e implementar nuevos hábitos debes hacerte estas 4 preguntas:

1. ¿Cómo puedo dejar claro este comportamiento?
   1. Determinar específicamente como, cuando y dónde El nuevo hábito se llevará a cabo.

2. ¿Cómo puedo hacer que este comportamiento sea atractivo?
   1. Esto es cuestión de recompensa. Somos conscientes de que si creamos un nuevo hábito hoy, no podremos obtener resultados en una semana, pero sí podemos crear pequeñas recompensas para hacer el hábito más atractivo.
   2. Ej: si quieres ver una serie, pero necesitas hacer ejercicio, puedes condicionarte a verla solo después de hacer ejercicio.

3. ¿Cómo puedo hacer que este comportamiento sea fácil?
   1. Recuerda: 1% todos los días. Un pequeño hábito mantenido con éxito es mejor que un gran hábito que nunca podrás mantener.
4. ¿Cómo puedo hacer que este comportamiento sea satisfactorio?
   1. Los hábitos deben ser agradables si quieres que duren. Hay una versión de cada hábito que puede traerte alegría y satisfacción. Necesitas encontrar esa versión.

CONCLUSIÓN

Hay un gran poder en los pequeños hábitos, así que empieza poco a poco.

Para obtener más consejos para mejorar su carrera profesional y empresarial, siga las publicaciones aquí en el blog de ValorH.